"El progreso mundial para satisfacer las necesidades voluntarias de planificación familiar (PF) ha ido avanzando. En 2022, 371 millones de mujeres de todo el mundo utilizaban un método anticonceptivo moderno, lo que supone un aumento de 87 millones en la última década, y se ha observado un mayor uso en todas las regiones. Sin embargo, los avances han sido desiguales en los distintos países y grupos demográficos. Además, este progreso tan arduamente conseguido se ve amenazado en todas partes por el empeoramiento de crisis interrelacionadas que perturban los sistemas de salud y afectan de manera desproporcionada a las mujeres, las niñas y las personas históricamente marginadas. Ninguna región o entorno es inmune a los riesgos que plantean el cambio climático y los brotes de enfermedades infecciosas, y el número y la gravedad crecientes de los conflictos han agotado los recursos destinados a la salud en muchos países."